LA BÚSQUEDA DE NUESTRA IDENTIDAD
Al principio del Despertar espiritual aprendemos a percibir el silencio que está presente detrás de todo lo que se agita, tanto en el exterior como en el interior del hombre. Comenzamos a pensar en el silencio eternamente presente, y el pensamiento de ese silencio, que es una evocación, nos encamina hacia la percepción del silencio. Es entonces cuando realizamos la experiencia interior del silencio del Ser. A partir de ahí, ha sido dado el primer paso: de la creencia hemos pasado al saber. En lo sucesivo nos será imposible dudar, sabremos que el Ser intemporal y silencioso existe. Lo sabemos pues hemos experimentado su presencia. Podemos olvidar esta presencia, dejándonos absorber por los dinamismos de la existencia, pero nada puede privarnos de este conocimiento. Y, sin embargo, hay una forma más elevada de saber a la que debemos acceder. En esta forma de saber, ya no se trata simplemente de percibir el silencio del Ser. Debemos comprender por medio de la experiencia intuiti