4ª POSICION LLAMADA DE LA SINTESIS

"Lo primero vino la síntesis Védica, El coronamiento de esta síntesis fue, en la experiencia de los Rishís" (Videntes) Védicos, algo Divino, Transcendente y Bienaventurado, en cuya unidad, el alma ascendente del hombre, y la eterna plenitud Divina de los dioses cósmicos se acoplaban perfectamente y se completaban. Los Upanishads se sirven de esta experiencia final de los antiguos profetas y la toman como punto de partida para llevar a cabo una segunda y profunda síntesis del Conocimiento espiritual. La Bhagavad-Gita parte de esta síntesis védica tomando las ideas esenciales como base sobre la que erige otra harmonía de los tres grandes medios, de los tres grandes poderes, Amor - Conocimiento - Obras - por medio de los cuales el alma humana puede aproximarse directamente a lo eterno y fundirse en El.

Queda todavía otra síntesis, la Tántrica, la cual, siendo menos sutil y profunda espiritualmente, que la Bhagavad-Gita, es más audaz y poderosa todavía, pues llega a aprovecharse de los obstáculos de la vida espiritual y los obliga a convertirse en medios de una conquista espiritual más rica, permitiéndonos en nuestras posibilidades divinas, de abrazar la totalidad de la vida como Lila (juego cósmico) de lo Divino.

Nosotros, hombres de hoy, nos encontramos en el umbral de una nueva era de desarrollo que debe conducir a una síntesis nueva y más basta. No tenemos por qué ser Vedantístas ortodoxos de una cualquiera de las tres escuelas, ni rebuscar dentro de las enseñanzas de la Bhagavad Gita. Esto sería limitarnos y querer crear nuestra vida espiritual con el ser, el conocimiento y la naturaleza de otro; de los hombres del pasado, en lugar de construirla con lo que nosotros somos y con lo que vive latente en nosotros. Nosotros no pertenecemos a las auroras del pasado, sino a los mediodías del futuro. Una gran masa de nuevos elementos se está desparramando a nuestro alrededor. No sólo necesitamos asimilar las influencias de las grandes religiones teístas de la India y del mundo, así como un redescubrimiento de lo que representa el Budismo, sino también tener en cuenta las poderosas, si bien limitadas, revelaciones de la ciencia y de la investigación modernas.

"Así como las síntesis pasadas han tomado a las precedentes como punto de partida, la síntesis del futuro debe también, si quiere tener una base sólida, derivar de lo que han dado la suma de los grandes pensamientos y experiencias espirituales del pasado". (Sri Aurobindo - Introducción a la Bhagavad-Gita).

Un estudio comparativo profundo de las diferentes religiones nos permite constatar, que su unidad fundamental al nivel Esotérico se acompaña, de una complementariedad al nivel de las perspectivas que ellas proponen. Esto se explica si comprendemos que a través del tiempo, y según el genio que le era individualmente propio, cada tradición se ha interesado de una forma particular por un aspecto u otro de la dimensión espiritual. Por ello, la Mayeútica se arraiga en lo que les es común a todas las religiones, pero al mismo tiempo, en la complementariedad de ciertas escuelas espiritualistas. Su enseñanza propone una síntesis de la quintaesencia de todas las grandes tradiciones. A la civilización planetaria que poco a poco se está erigiendo, le debe corresponder una espiritualidad planetaria. Debemos salir del rebaño y preparar la nueva luz del futuro.

Una verdadera síntesis planetaria necesita la depuración de todo lo que no tiene valor universal, siendo solamente la expresión de un particularismo cultural, ritual o de costumbre. El rechazo de todas las deformaciones, perversiones y anquilosamiento que han proliferado a partir de doctrinas venerables reveladas por Dios a los hombres. Así como terminar en la perspectiva Esotérica, con las diferentes polémicas y contradicciones entre las doctrinas. Contradicciones aparentes que no son más que la consecuencia de una incomprensión mutua.

Esta síntesis, situada en el nivel de lo vivido interiormente del Esoterismo, no tiene nada que ver con las formas exteriores de la espiritualidad y de la religión. Estará, pues, libre de toda representación teológica y de todo ritualismo. Por esto mismo no podrá ser confundida con una forma cualquiera de sincretismo.

Uno de los aspectos de esta síntesis es la fusi6n entre las vías de la Gnosis Mística y de las Obras.

La Gnosis es el conocimiento del Principio Supremo. Es el conocimiento de Dios. El conocimiento de Dios incluye el conocimiento del hecho de que nuestra Esencia, nuestra identidad profunda, nuestro yo, es Dios mismo. Esta identidad profunda permanece más allá del hombre en sus aspectos físico y síquico. Vivir el Conocimiento Gnóstico de nuestra identidad profunda, es liberarse de la prisión de la temporalidad.

La Mística es la relación que se establece entre Dios y el hombre. Relación de amor, devoción y sumisión.

Mística y Gnosis son complementarias. Por la Gnosis conocemos nuestra Esencia; por la Mística transfiguramos la individualidad humana. La Esencia eterna y la individualidad humana no se excluyen, tan sólo se sitúan a dos niveles diferentes.

Ciertos sabios tuvieron un Conocimiento exclusivo de la Esencia Suprema. Ciertos Santos sólo cultivaron el aspecto relacionar de la Mística. Otros Maestros espirituales han realizado a la vez la Gnosis y la Mística.

En cuanto a la acción, que nos hace llevar a cabo las Obras, se desprende de! amor. Es por amor a Dios, presente en todos los seres, por lo que trabajamos para manifestar aquí abajo la Luz Divina. Es por amor a Dios, que se manifiesta en nosotros y que nos empuja a realizar las obras, por lo que su Gracia y su inspiración nos guían.